Ingredientes

• Para la masa de los Macarons necesitaremos:
• 120 gr de claras a temperatura ambiente
• 100 gr de harina de almendras
• 200 gr de azúcar glas
• 50 gr de azúcar blanco
• 2 cucharaditas de extracto de café
• Cacao en polvo para espolvorear
• Para el relleno, una deliciosa crema pastelera de café:
• 1 vaso de leche (250 ml, aprox)
• 1/2 taza de CAFÉ FRANCO preparado y bien cargado (4 gr de café aprox)
• 1 cucharada de maizena
• 4 cucharadas de azúcar blanco (4 sobres de azúcar)
• 2 yemas de huevo

Preparación

• Para la masa:
• Tamizamos bien el azúcar glas y la harina de almendras. Lo mezclamos muy bien.
• Batimos las claras y al final del proceso añadimos los 50 gramos de azúcar blanco.
• Cuando la mezcla esté brillante, añadimos el extracto de café. Batimos de nuevo.
• Incorporamos la mezcla de azúcar y almendra con ayuda de una espátula.
• Con movimientos envolventes, y tratando de que no se bajen las claras, mezclamos hasta tener una masa homogénea.
• El merengue se tiene que quedar como si fuese espuma de afeitar. Cargamos la manga pastelera.
• Para la boquilla de la manga pastelera podemos usar boquillas de 6 mm a 12 mm, según queramos que salga el macaron. Una vez colocada la boquilla tenemos que hacer círculos de unos 3 – 4 cm de diámetro.
• Una vez los tenemos en la bandeja, la golpeamos firmemente contra la mesa para que se escapen las burbujas de aire que hayan quedado. Tamizamos cacao por encima.
• Después tenemos que esperar hasta que estén secos por fuera y al tocarlos que no se nos queden pegados.
• El tiempo de secado suele rondar la media hora pero puede oscilar hasta la hora u hora y media.
• Mientras acaba de secarse la masa debemos poner el horno a unos 150º aproximadamente.
• Una vez la masa quede seca por fuera estará lista y podremos pasar a meterla en el horno.
• Pasado ese tiempo, horneamos a 150º unos 15 minutos. Los sacamos y los dejamos enfriar.
• Para el relleno:
• En un cazo se vierten 200 ml de leche fría y se le añaden 2 cucharadas de azúcar blanco y el CAFÉ FRANCO soluble, se mezcla bien. Se disuelve la maizena en el resto de la leche.
• Por otro lado, se baten las yemas de huevo con las otras 2 cucharadas de azúcar blanco.
• Finalmente, se echan tanto yemas como maizena en el cazo de la leche, se revuelve bien y se lleva a ebullición muy despacio, sin dejar de moverlo. Sólo debe dar un pequeño hervor y retirar.